Lejos de nuestra intención el uso indiscriminado de extranjerismos, existiendo equivalentes en castellano. Pero en este caso recurrimos a la extravaganza por los ecos que tiene hacia un tipo de espectáculos de variedades musicales y circenses propias del XIX anglosajón. Y es que de espectáculos de feria va este post dedicado a libros.
Desde el libro más grande del mundo presentado en Dubai, y que contiene la biografía de Mahoma en 5 metros de largo, 4 de ancho y 1.5 de grosor; al más pequeño, con la edición de El camaleón de Chéjov en menos de 0.9 x0.9 milímetros; hasta el record mundial de girar un libro sobre un dedo conseguido por el nepalí Thaneshwar Guragai.
Pero aún vienen muchos más en este artículo. Los que no se contemplan son récords menos vistosos pero que a nosotros nos gustan mucho más: como son los biblioburros en Colombia, el que las bibliotecas murcianas seamos las segundas mejor consideradas a nivel nacional, las movilizaciones que los vecinos de barrios aragoneses o granadinos hacen por sus bibliotecas, y tantos y tantos otros que hemos ido recogiendo en nuestra serie Orgullo bibliotecario.
Tal vez no sean tan vistosos, y ni siquiera sean de récord, pero a nosotros nos parecen mucho más meritorios.
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