Jean Cocteau |
Cartel ficticio para La ley del deseo de Pedro Almodóvar |
Nuestro idiolecto, o lo que es lo mismo, nuestra forma característica de hablar, nos configura tanto como las palabras que utilizamos. Por eso, no es de extrañar, que imaginemos voces cuando estamos leyendo. A cada texto, a cada personaje, a cada mensaje, le asignamos una voz; y por eso muchas veces, al descubrir las voces reales de algunas estrellas de Hollywood, se nos cae el mito a los pies.
Algo que no pasa con nuestra colección de audiolibros, en la que los mejores locutores recitan algunas de las mejores obras de la literatura para personas con o sin dificultades para la lectura. Jean Cocteau sabía bien lo que puede calmar o enervar escuchar una voz humana, y esta colección acompaña a más de uno de nuestros usuarios en sus desplazamientos, quehaceres diarios o soledades elegidas. No son voces distantes, como la estupenda película de Terence Davies, sino voces próximas, que nos acercan lo mejor de la creación literaria en sonidos.
Anna Magnani, Ingrid Bergman y Carmen Maura: tres grandes haciendo suya La voz humana de Cocteau |
Situando dicho aviso junto a algún texto literario, aconseja imaginarlo en la voz del actor (quien no por casualidad, ha sido el encargado de poner voz al mísmisimo Dios en varios films). Así pues, antes de que empecemos a oír voces sin recurrir a la imaginación, cerramos este post arrullados por el poema que Freeman recita en Invictus (curiosamente dirigida por uno de las estrellas a quienes ha doblado Constantino Romero: Clint Eastwood). El círculo se cierra, y seguimos oyendo voces.
No hay comentarios:
Publicar un comentario