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| Los gnomos de jardín defendiendo sus posiciones |
Los ¿¿entrañables?? y decorativos gnomos de jardín puede que tengan los días contados, las pequeñas bibliotecas libres se extienden como una plaga que amenaza la supervivencia de estas obras supremas del kitsch más desatado, y que hasta ahora, habitaban los jardines de medio mundo con total impunidad.
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| Instrucciones para sobrevivir a un ataque de gnomos de jardín |
Es la invasión de las pequeñas bibliotecas libres, un movimiento surgido en Wisconsin que hace brotar pequeñas bibliotecas en cualquier ubicación o rincón urbano (preferiblemente jardines) en los que la gente pueda dejar sus libros favoritos para que otros transeúntes los recojan para leerlos, y a ser posible añadan nuevos títulos. Y que al alojarse en muchos casos en jardines privados, favorecen las relaciones de buena vecindad: en vez de acudir con una tarta, o a pedir sal al vecino, ahora la costumbre será visitar su pequeña biblioteca.
Una especie de bookcrossing pero con alojamiento para los libros, que tal cual como casetas de pájaros, les sirven para anidar hasta que el próximo lector les haga levantar el vuelo, llevándoselos a casa.
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| Modelos de pequeñas bibliotecas libres |
Y raíz de este movimiento (tan similar al de la Guerrilla bibliotecaria) los estudiantes de arquitectura de la Universidad de Louisiana, se han enfrentado al reto de crear nuevas pequeñas bibliotecas libres que se puedan “plantar” en cualquier lugar.
Las espadas están en alto, entre gnomos y pequeñas bibliotecas libres. ¿Optarán en algunos de los ostentosos chaletes que pueblan nuestra huerta murciana, por jubilar a los vilipendiados gnomos y diseminar pequeñas bibliotecas libres? ¿se extinguirán las imitaciones de estatuas pseudo-grecorromanas, y se llenará de cultura libraria la huerta murciana?
Una cruenta batalla se libra en los jardines de medio mundo.
4 comentarios:
Felicidades a quien(es) sea(n) responsable(s) de ideas tan hermosas y creativas como las que se disfrutan en este Blog. Es la iniciativa cultural más bonita que he disfrutado en Murcia en los últimos años. Hace falta. Gracias.
Muchísimas gracias Ana, nos abruman tus palabras, siempre intentamos informar, divertir y aportar algo desde el punto de vista cultural, y con seguidores como tú, vemos que estamos haciendo lo correcto.
Una vez más, muchísimas gracias por tus palabras, nos animan mucho.
La verdad es que estas bibliotecas nos harían superar (o, al menos, llevar mejor) el trauma de "libro prestado = libro perdido", siempre y cuando, claro está, al coger uno dejaran otro.
Me gusta la idea pero, por desgracia, no la veo funcionando en Murcia. Y no seré yo quien saque libros al jardín. Lo siento pero los valoro demasiado.
Excelente blog, por cieto ;)
Muchas gracias, y coincidimos contigo, no creemos que tuviera mucho éxito en un país como en el nuestro. En Suiza los periódicos se ofrecen en expendedores abiertos en la calle, sin vigilancia, donde cada lector introduce el dinero en una ranura,y a nadie se le ocurre robarlos. En España ¿veremos algún día respetar el bien común? Mejor que no entremos en esos jardines, que nos perderíamos en laberintos de dolorosa actualidad.
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