![]() |
Rómpete la cabeza pinchando en las letras verdes |
Por no seguir mareando después de tres años de centrifugados, este 2016 vamos a afrontarlo rompiéndonos la cabeza para seguir intentando encontrarle un sentido a lo que cada mes da de sí este blog.
No es la primera vez que en publicaciones sobre neurología se ensalzan los beneficios, tanto para niños como para adultos: de la lectura, la escritura y los juegos tipo rompecabezas, para mantenerse activo mentalmente, y prevenir enfermedades como el Alhzeimer. Así pues, no necesitamos excusa alguna para desterrar a los centrifugados, y empezar una esquina de lo que será la imagen final de este 2016.
El primer mes del bisiesto 2016 no nos lo pone muy fácil; no tiene muchas piezas, pero va a costar un poco encajarlas. La primera pieza era de tonos oscuros, de esas de difícil ubicación, porque siempre se hace arduo encajar que un espacio cultural cierre sus puertas. La súbita desaparición de Espacio Pático nos llevó a una reivindicación de los espacios urbanos de nuestra ciudad (y por extensión de todas las ciudades que amemos) como parte de la historia sentimental de cada uno.

Y encadenando pieza con pieza llegamos a encontrarle algún sentido a las reacciones tan extrañas que tiene la gente en las redes sociales, ante hechos como la muerte de una celebridad. No llegó a estudio sociológico, pero la pieza que correspondería al post sobre el pudor de las efemérides nos dio mucho juego, y hasta sirvió para homenajear a la que posiblemente sea la peor cantante de ópera del mundo.
La pieza incómoda, la que no encaja, la que les da mil vueltas sin saber muy bien donde ponerla: no porque no tenga su sitio, sino porque obliga a pararnos un poco y replantearnos las cosas vino con: No es biblioteca para viejos. Con ella reivindicamos el lugar que se merecen tanto nuestros mayores, como nuestros pequeños: sin dejarnos llevar por el ritmo estresante al que quieren someternos los tiempos.

Nosotros, a finales de marzo, volveremos a intentar recomponer las piezas de lo que haya acontecido en febrero: a ver si poco a poco, de tanto rompernos la cabeza, encontramos nuevas visiones, nuevas perspectiva que vayan dando sentido a nuestro relato.Aunque sabemos a ciencia cierta, que el único que puede darle sentido, eres tú lector.
No hay comentarios:
Publicar un comentario