[Haz clic en las letras azules, y centrifuga tu cerebro] |
El secretismo ha marcado al mes de febrero en este blog. Pero nada de secretos clasificados, mentiras encubiertas, y sorpresas desagradables a las que tan acostumbrados nos tienen. En este caso los secretos tenían que ver con el juego, con el suspense de abrir un regalo: y es que nuestro nuevo servicio Biblioteca Top Secret ha enganchado a los más jóvenes, haciendo cómplices a los mayores.
También son un misterio ciertos éxitos editoriales. Pero nosotros nos aventuramos a dar una explicación al boom de las 50 sombras de Grey (¡cuántas anécdotas impagables nos está proporcionando!) Y algo de razón tendremos cuando es uno de los post que sigue y sigue acumulando visitas.
Y ya que hablábamos de novela rosa adulterada, no podemos dejar de mencionar a la Agencia matrimonial BRMU, que montamos el pasado 14 de febrero. Un experimento (sugerido por nuestra compañera Carmen Simón de la Biblioteca de El Carmen) que también nos salió bien, y enamoró a más de uno. Tanto es así, que hasta nos atrevímos a ofrecernos para experimentos más arriesgados, tal cual como mascotas mártires de la carrera espacial.
Y en el infinito o más allá, nos quedábamos colgados cual perra Laika soñando con ser bibliotecarios de Beyoncé, o de cualquier otra estrella. Después de todo, y tal cual el eslogan de la Metro: tenemos más estrellas que en el cielo, y como el mayor Tom al que cantaba Bowie, nos quedamos flotando en el espacio exterior, para hablar de redes sociales, activismo, telepatía, y de un preciado TABÚ (de nuevo lo secreto aflorando durante este mes).
En cambio nuestra identidad no es nada secreta, todo está bien a la vista, y por eso precisamente el peligro de que nos suplanten la identidad en estos tiempos de mascaradas digitales, es un riesgo del que también hablamos. Tal vez sea por ello, que terminásemos reafirmándonos de la manera más contundente posible, haciendo nuestro el grito de guerra hip hop autóctono de: ¡¡¡MURCIA TROPIKAL!!!