martes, 24 de noviembre de 2015

XXI, siglo zombi

Los dibujos de Laura Barnés Calventus
 se estrenan en Bibliofriki en la tarde zombi

A cada momento histórico le corresponde su monstruo.

El género fantástico, bien en literatura, cine o arte en general, es el que mejor ha sabido dar cuerpo a los miedos de cada época y civilización.

Si en la Edad Media el Golem moldeado de barro, era el monstruo que infundía pavor entre los enemigos de la religión;  su sucesor encarnado en la figura de Frankenstein, dio vida al temor hacia los progresos de la ciencia en el siglo XIX; al mismo tiempo, que el vampiro emergía de las sombras catapultado por Bram Stoker, con toda la carga de sexualidad reprimida de la sociedad victoriana.

Y si a lo largo del XX, han sido los vampiros, licántropos, gorilas gigantes y demás monstruos los que han servido para asustar: ¿serán los zombis los encargados de representar los miedos del XXI? No les faltan méritos. Los vampiros con purpurina de las sagas adolescentes han terminado por finiquitar la exquisita elegancia del Nosferatu; y por su lado, el pobre Frankenstein ya no asusta a nadie. Todos amamos las nuevas tecnologías, y cada vez hay menos reticencias a que la ciencia llegue a enmendarle la plana a Dios.

En cambio, el zombi es un superviviente. Una vez perdido para siempre el romanticismo de clásicos como Yo anduve con un zombi de Tourneau, o La legión de los hombres sin alma con Bela Lugosi: se ha hecho groseramente pop y contemporáneo.

El zombi de hoy en día, zarrapastroso, de pensamiento único, infeccioso y en permanente estado de descomposición admite mil lecturas que se avienen a la perfección con crisis globales, terrorismo, consumismo, corruptelas, epidemias y demás azotes de las primeras décadas de este siglo.

No sabemos si algunos de estos temas serán tratados por nuestros ilustres contertulios de la mesa redonda que, tenemos programada dentro de la tarde zombi (miércoles 25) de nuestra Bibliofriki. Pero es más que probable que tanto Francisco Giménez como Antonio Rentero, no se limitarán a una simple conversación sobre zombis de ficción, y encontrarán múltiples ejemplos de zombificación en nuestra sociedad con los que ilustrarnos.

Tendrán antes una película que inspira a cualquiera para buscar estas segundas lecturas al género de zombis, más allá de la carne descompuesta y la antropofagia. Juan de los muertos, la primera y multipremiada película cubana de zombis, que promete infecciones, mala uva y risas a partes iguales.



Pero la tarde empezará antes, con los juegos Zombicide y Hall of Horror que Ludus Myrtea podrán a disposición de todos los que quieran disfrutar masacrando zombis. Todo ello bien ambientado gracias a los fantásticos dibujos de Laura Barnés Calventus, una ilustradora en pleno auge que retrata, entre otras muchas cosas, a los zombis como nadie: y que expone en los espacios de la planta -1, en la que se desarrollarán las actividades de Bibliofriki durante toda esta semana.




Y no podemos cerrar sin algo de ambientación musical. La combinación Peaches-Iggy Pop en medio de un holocausto zombi, es la mejor descarga posible de adrenalina para afrontar una tarde (y un siglo), que prometen muchos nuevos miedos que exorcizar gracias a tan entrañables (por lo de entrañas) personajes.



Programa completo de Bibliofriki

2 comentarios:

Anónimo dijo...

El miedo y sus manifestaciones es buen tema para abordar las preocupaciones que nos abruman el día a día.

En efecto la literatura y el cine han abordado estas inquietudes a lo largo de la historia y cada momento ha configurado un monstruo que pone cara a esos miedos, convirtiendo esta emoción en objeto de entretenimiento.

En actualidad el género de terror está cada vez más normalizado desde las fiestas góticas, a la cada vez más popular noche de Halloween, hasta festivales de cine, etc.

En mi opinión estamos desdramatizando los hechos que desde la noche de los tiempos nos han atormentado: la muerte, la enfermedad,la soledad, la dominación por los explotadores de turno, etc. Ya, nuestros ancestros tenían que luchar para controlar estos miedos. En la actualidad nos reímos de nuestros miedos representándolos con estos monstruos irrisorios "LOS ZOMBIS".... qué representan, pues necesitaríamos un tratado de miedos para poder desentrañar tanto MIEDO.

El blog de la BRMU dijo...

Completísima reflexión. Bienvenidos sean los monstruos de fantasía si nos sirven para ahuyentarnos los miedos.